Tarta helada tres sabores.

Los más golosos disfrutarán enormemente con esta tarta helada, es un regalo para el paladar. La tarta helada tres sabores,  conviene empezar a prepararla el día anterior, así se van elaborando las distintas capas, dándoles su tiempo para enfriar y congelar. Es, por lo tanto, una buena opción para tenerla preparada si vamos a tener invitados, el postre estará hecho y tendremos más tiempo para compartir con ellos.

Ingredientes: 200 grs de galletas Oreo sin el relleno. 75grs de mantequilla. 500m de nata para montar. 100 grs de azúcar. Unas gotas de extracto de vainilla.

Para el toffee: 150 grs de azúcar moreno. 70 grs de agua. 1 cucharilla pequeña de lecitina de soja. 50 grs de mantequilla. 100 grs de nata para montar.

Para el ganache: 250 ml de nata para montar. 250 grs de chocolate repostería. 

Preparación:

1. Preparar  un molde  desmontable, el mio  era de 26 cm., cubrir  la base con papel vegetal, después facilitará el paso a una bandeja de presentación.
2. Abrir  las galletas y retirar  el relleno, triturar  las  galletas hasta hacerlas polvo, añadir a continuación la mantequilla a temperatura ambiente y mezclar  bien. Cubrir la base del molde con esta mezcla presionando bien y procurando dejar una superficie lisa y nivelada. Introducir el molde en el congelador.
3. Montar  entonces la nata con el azúcar y la esencia de vainilla, recordar  que la nata debe estar bien fría para que monte bien, incluso a veces es recomendable que el recipiente en el que la vais  a montar esté también frío de la nevera. Verter  la nata sobre la base de galleta dejando de nuevo una superficie lisa y volver  a introducir el molde en el congelador.
4. Preparar  el toffee , poner  en un cazo la mantequilla a fuego lento y dejarla fundir, retirar  la espuma que quede en la superficie. Mientras tanto poner  en otro cazo el azúcar y el agua, cocer  a fuego medio sin remover hasta obtener un almíbar.
5. Verter entonces la mantequilla fundida sobre el almíbar, añadir la lecitina de soja y finalmente añadir  la nata. Cocer a fuego lento durante media hora aproximadamente, moviendo de vez en cuando hasta que la textura sea de caramelo, no demasiado espeso, pues al enfriar cogerá más cuerpo. Cuando el toffee esté frío, verterlo  sobre la nata de la tarta, alisar y volver  a introducir en el congelador.
6. Preparar  el ganache, poner  la nata en un cazo a calentar, y antes de que entre en hervor retirarla, ir incorporando el chocolate poco a poco y moviendo con una espátula para que se funda y mezcle bien, deberéis  obtener una crema de chocolate densa y homogénea. Dejarla enfriar a temperatura ambiente, y cuando esté fría, verterla  sobre la capa de toffee de la tarta. Introducir  el molde de nuevo en el congelador, un par de horas o hasta el día siguiente.
7.  Podéis  desmoldar recién sacada del congelador y pasarla a la bandeja en la que vayas a presentarla. Decorarla con ralladura de chocolate y lacasitos. Cómo más os  guste. Estando la tarta unos 15 minutos fuera del congelador y ya decorada, estará lista para servir.

¡Que te aproveche!