Colines.

Colines, palitos de pan crujientes y sabrosos, que nos gustan para comer algo sano y nutritivo en cualquier momento del día, para servir en el aperitivo e incluso para acompañar algunas comidas, son muy fáciles de hacer y podemos enriquecerlos con aceite de oliva, con semillas, con especias, con aceitunas, con queso… En esta ocasión he  hecho los colines finos y largos, es muy fácil y cómodo extender la masa y cortar tiras de masa a vuestro  gusto, así que cuando preparéis esta receta de   colines ya sabéis que podéis darles el tamaño que más os guste.

Ingredientes: 500 grs  de harina de fuerza. 6 grs  de levadura fresca de panadero. 325 grs  de agua templada.  8 grs de sal. 25 grs  de semillas de sésamo (sin tostar).

Preparación: 

1. Disolver  la levadura fresca frotándola con los dedos contra la harina o disolviéndola en un poco de agua tibia. Poner  en un bol amplio la harina con la levadura, el agua y la sal, ésta no debe entrar en contacto directo con la levadura. Incorporar también las semillas y empezar a ir uniendo los ingredientes hasta que se integren y entonces amasar  en la superficie de trabajo durante 6-8 minutos, o hasta que obtengáis una masa homogénea, fina y elástica. (Podéis usar amasadora o batidora con varillas para amasar). Si utilizáis  Thermomix, no añadir  las semillas de sésamo  hasta finalizar el amasado, pues las cuchillas las cortan,
2. Hacer  una bola con la masa y poner  en un bol limpio espolvoreado con harina o engrasado con aceite de oliva. Cubrir  con el paño de tela y una mantita y dejar a temperatura cálida durante una hora o hasta que doble su volumen.
3. Pasado este tiempo, verter  la masa en la mesa de trabajo ligeramente enharinada y extender con un rodillo como si hicierais  una pizza fina, aproximadamente entre medio y un centímetro de grosor. Con un cuchillo bien afilado, cortar  tiras finas de la masa y ponerlas  sobre la bandeja del horno (necesitáis  hacer varias hornadas, dejar espacio entre los colines  para que no se peguen durante el levado y horneado) cubierta con papel vegetal, teflón o silicona.
4. Cubrir  la bandeja con un paño (mientras calentáis el horno) y encender  con calor arriba y abajo a 200º. Cuando esté caliente hornear  los colines durante 10-15 minutos, hasta que estén dorados y crujientes. Al retirarlos, pasarlos a una rejilla para que se enfríen y permanezcan crujientes.

¡Que te aproveche!