Codillos de cerdo.

Uno de los estofados  que más nos gustan son los codillos de cerdo, es fácil que cualquier celebración, una visita de amigos o familiares, o un domingo que queramos disfrutar hasta saciarnos de un buen estofado, y en este caso, tengo  que reconocer que no somos comedidos con las raciones, por eso pierden protagonismo los aperitivos o entrantes, servimos algo ligero para refresar y abrir boca, y a continuación, a disfrutar del estofado.

Ingredientes: 4 codillos de cerdo. 2 cebollas bien picadas. 4 dientes de ajo laminados. 3 zanahorias bien picadas. 2 tomates maduros, bien picados. 250 ml de vino tinto. 250 ml de caldo de jamón (sirve otro hueso).  Aceite de oliva. Sal. Harina para rebozar. 1 cucharilla de pimentón dulce.

Preparación:

1. Poner en una olla con agua a cocer el hueso para hacer el caldo. Sazonar.
2. Enharinar los codillos y dorarlos bien en una sartén con aceite. Sazonar.
3. En una tartera amplia (donde valláis a preparar los codillos, pochar los ajos,la cebolla y la zanahoria (utilizar el mismo aceite de dorar los codillos, pasarlo por un colador) Ir dándole vueltas de tanto en tanto. Cuando la cebolla comience a coger color tostado, añadir el tomate. Remover todo bien y dejar pochar 10 minutos más.
4. Incorporar los codillos y bañar con el vino. Mover un poco la tartera y dejar 5 minutos.
5. Ir añadiendo caldo a los pocos (según necesitéis). Tapar la tartera y dejar cocer a fuego lento 90 minutos.
6. Cuando quede poco de su cocción, añadir una cucharilla de pimentón dulce a 1/2 vaso de agua (deshacerlo bien) e incorporarlo al estafado, mover la tartera para que se mezcle todo bien. Comprobar el punto de sal.

¡Que te aproveche!